Esos fondos se destinarán a la población necesitada en ese país y a los refugiados ucranianos de los países vecinos, según un comunicado difundido por la oficina del portavoz del secretario general de Naciones Unidas, António Guterres.
De acuerdo con cifras del organismo multilateral, al menos 12 millones de personas en Ucrania necesitarán ayuda y protección, mientras que más de cuatro millones de refugiados podrían requerir apoyo.
También con esos recursos se busca distribuir dinero en efectivo para los más vulnerables, así como alimento, agua y apoyo para el sistema de salud y la educación, y asistencia para construir refugios y reparar casas dañadas.
El secretario general de Naciones Unidas enfatizó en que la comunidad internacional debe brindar apoyo inequívoco a las personas afectadas por el conflicto en Ucrania, de acuerdo con los principios humanitarios de neutralidad, imparcialidad, independencia y humanidad.
Según destacó el titular, la ayuda humanitaria más efectiva es silenciar las armas: ahora más que nunca, debemos intensificar nuestros esfuerzos por la paz, en todas partes.
Guterres manifestó también gran preocupación por el uso de armas pesadas contra los centros urbanos de Ucrania.
El máximo representante de Naciones Unidas alertó que las repercusiones del conflicto en ese país de Europa del este ya se sienten en todo el mundo.
Ucrania continúa en el centro de la atención en la ONU mientras prosigue este martes la sesión especial de emergencia para abordar el conflicto en ese territorio.
Rusia inició el pasado 24 de febrero una operación militar en Ucrania, después de que las autoridades de las autoproclamadas Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk solicitaran ayuda para repeler la agresión de Kiev.
Antes, Moscú reconoció la independencia y soberanía de ambos territorios y firmó tratados de amistad, cooperación y asistencia mutua con sus líderes, los cuales incluyeron el establecimiento de relaciones diplomáticas y la ayuda militar.
El Gobierno ruso ha subrayado el incumplimieto por parte de Kiev de los Acuerdos de Minsk y advierte de las agresiones de grupos nacionalistas contra objetivos civiles, en tanto Occidente culpa a Moscú de tales acciones.
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