Durante una alocución pública, el mandatario venezolano reiteró su llamado a retomar el camino del entendimiento diplomático, al tiempo que ratificó el respaldo al Gobierno ruso frente a la aplicación de medidas coercitivas y la campaña mediática contra Moscú por parte de Occidente.
“Venezuela apoya firmemente las negociaciones de paz entre Rusia y Ucrania; aspiramos a resultados favorables que restablezcan la paz y la tranquilidad en esa región”, subrayó el jefe de Estado.
Maduro cuestionó las pretensiones de Estados Unidos y sus aliados de Europa de imponerse en un mundo unipolar y emplear a la Organización de las Naciones Unidas y los organismos políticos y económicos internacionales en favor de sus intereses hegemónicos.
El presidente de Venezuela indicó que las nuevas formas de guerra giran en torno al uso indiscriminado e ilegal de la ventaja del dólar y del sistema financiero para chantajear al resto del mundo.
En tal sentido, el dignatario calificó de criminales las recientes acciones punitivas implementadas contra la nación euroasiática, tales como la desconexión del sistema interbancario Swift, el cierre de espacios aéreos y la exclusión de vínculos comerciales.
Maduro condenó además la campaña mediática contra Rusia, así como el boicot y censura de Occidente a los principales medios de información de ese país -dígase el canal Rusia Today y la agencia Sputnik- en las plataformas digitales y proveedores de señal de televisión.
El mandatario venezolano sostuvo la víspera una conversación telefónica con su homólogo ruso, Vladimir Putin, a quien transmitió un mensaje de apoyo y solidaridad frente a las amenazas contra la seguridad de ese país por los planes expansionistas de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en Europa del este.
Durante el intercambio, Maduro subrayó la necesidad de contrarrestar la campaña de mentiras y desinformación contra Moscú, e hizo votos en favor del entendimiento y el diálogo como vía para la preservación de la paz.
Rusia inició el pasado 24 de febrero una operación militar en Ucrania, luego de que las autoridades de las autoproclamadas Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk solicitaran ayuda frente a la agresión de Kiev, en un contexto de agudización de las posturas belicistas de los países de la OTAN.
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