Citado por el diario Al Ahram, el ministro de Abastecimiento y Comercio Interior, Mohamed Moselhi, minimizó los temores sobre una interrupción en el suministro de ese cereal debido la guerra.
Esta nación norafricana es el mayor importador de trigo del mundo con 5,5 millones de toneladas el pasado año, y el 80 por ciento de esa cifra provino de Rusia y Ucrania.
Moselhi aclaró que también se compra ese alimento a compañías de Estados Unidos, Francia, Rumania y Kazajstán.
Según un reciente informe del Departamento de Agricultura norteamericano, Rusia Y Ucrania representan un 29 por ciento de las exportaciones mundiales de trigo.
El funcionario destacó la importancia de aumentar la producción nacional, pues la tonelada pasó en los mercados internacionales de 250 dólares a más de 330 en apenas 12 meses.
Resaltó que las reservas estratégicas de trigo de Egipto son de 3,2 millones de toneladas, suficientes para hasta cuatro meses de consumo.
Moselhi subrayó que el país planea producir entre nueve y 10 millones de toneladas en un futuro próximo, para lo cual se ampliaron las tierras de cultivo como parte de la estrategia para alcanzar la autosuficiencia en el sector.
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