Lo anterior lo señaló una declaración conjunta emitida un día después de la XV ronda de conversaciones a nivel de comandantes de cuerpos de Ejércitos, realizada en el lado indio del puesto fronterizo de Chushul-Moldo, para hallar una solución mutuamente aceptable del conflicto a lo largo de la línea divisoria en el este del territorio indio de Ladakh, en el Himalaya.
Las delegaciones de los dos países más poblados de la Tierra y con armamento nuclear acordaron mantener la seguridad y la estabilidad sobre el terreno en la zona y continuar el diálogo a través de los canales militares y diplomáticos, para resolver el enfrentamiento de 22 meses en los puntos de fricción restantes a la mayor brevedad posible.
Las dos partes continuaron sus debates desde la ronda anterior celebrada el 12 de enero de este año para zanjar las cuestiones pertinentes a lo largo de la denominada línea de control real, que separa temporalmente a ambas naciones, en el sector occidental.
Los delegados de los dos países mantuvieron un intercambio de puntos de vista, de acuerdo con la orientación proporcionada por los líderes de los respectivos estados para trabajar en la solución de los temas restantes lo antes posible.
La delegación del ejército indio en las conversaciones fue encabezada por el teniente general Anindya Sengupta, oficial al mando del XIV Cuerpo de Ejército, y la comitiva del Ejército Popular de Liberación de China, por el general de división Yang Lin, jefe del estado mayor del distrito militar del sur de Xinjiang.
Desde que comenzó la disputa fronteriza en mayo de 2020 en el este de Ladakh, las partes sostienen diversos diálogos a nivel político, diplomático y militar en aras de preservar la paz regional.
Hasta ahora, las pláticas dieron como resultado la retirada de las tropas y medios de combate de las orillas norte y sur del lago Pangong, del valle de Galwan y de las zonas termales de Gogra.
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