El primer ministro Muhammad Shtayyeh afirmó en un comunicado que la tierra es la identidad y el centro de la lucha palestina contra la ocupación israelí y sus ambiciones expansionistas.
Nuestro pueblo no cederá en esta batalla ni un milímetro y tampoco aceptaremos nada menos que el establecimiento de nuestro Estado independiente en las fronteras previas a la guerra de junio de 1967, con Jerusalén Este como su capital, subrayó.
Shtayyeh denunció las políticas de doble rasero y reclamó sanciones internacionales para Tel Aviv por sus sistemáticos crímenes.
Por su parte, el Consejo Nacional Palestino llamó a defender la tierra ante la ocupación israelí.
Asimismo, criticó el desplazamiento forzado, las demoliciones de viviendas, la aplicación de leyes racistas, así como los asesinatos y arrestos cometidos por las fuerzas ocupantes.
Como parte de las actividades, en la gobernación de Jericó, en Cisjordania, fueron plantados numerosos árboles mientras en el campamento de refugiados de Jenin miles de personas marcharon hacia el cementerio para depositar ofrendas florales a los mártires palestinos.
En la Franja de Gaza dirigentes de diversas organizaciones y miles de personas con banderas palestinas se concentraron en la ciudad del mismo nombre para recordar la fecha.
Durante la actividad fueron lanzados globos con las imágenes de numerosas víctimas mortales de ataques israelíes.
El 30 de marzo de 1976 los militares israelíes asesinaron a seis árabes-israelíes durante las masivas protestas contra la expropiación de miles de hectáreas en los alrededores de las ciudades de Arraba y Sakhnin.
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