Las fuerzas de seguridad penetraron esta mañana en Jenin para arrestar a un supuesto implicado en el ataque mortal de hace dos días en la ciudad de Bnei Brak, que causó seis víctimas mortales, entre ellas el agresor.
Como resultado estalló un tiroteo entre los militares y los milicianos palestinos, según imágenes de diversas televisoras árabes.
El Ministerio de Salud palestino anunció que Sanad Abu Attia, de 17 años, y Yazid Al-Saadi, de 23, perdieron la vida, aunque medios de prensa reportan un tercer fallecido.
Otras 15 personas fueron heridas durante la operación, 14 de ellas por balas de fuego disparadas por los uniformados, precisó la cartera.
Un comunicado de las Fuerzas de Defensa de Israel reconoció que uno de sus soldados resultó lesionado.
Ante el nuevo crimen, ordenamos la movilización de todas nuestras unidades, anunció poco después en un comunicado Ziad al-Nakhala, secretario general de la Jihad Islámica.
Otro palestino fue ultimado este jueves cerca de la ciudad de Belén tras atacar con un arma blanca a un grupo de israelíes en un autobús. Al menos cuatro colonos resultaron heridos, uno de ellos de gravedad.
De forma paralela, las tropas de Tel Aviv detuvieron a 25 palestinos en una redada iniciada esta madrugada en diversos puntos de Cisjordania, que incluyó arrestos en las gobernaciones de Belén, Jenin, Nablus y Hebrón, así como en la ciudad de Jerusalén.
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