Para muchos de ellos, los demócratas deben convertir el aborto en un tema importante de campaña de cara a las ya cercanas elecciones de mitad de período, previstas para el mes de noviembre.
Inspirados por Texas, los estados rojos (color que identifica al Partido Republicano) se están moviendo rápidamente para restringir el acceso al aborto.
Arizona y Kentucky votaron para aprobar la prohibición de la interrupción del embarazo a las 15 semanas, mientras Idaho dio luz verde a un proyecto que no permitirá el procedimiento después de unas seis semanas de gestación y además faculta que se entablen demandas civiles contra “proveedores del aborto”.
Por su parte, Oklahoma está a punto de avalar propuesta que significará la prohibición casi total del término del embarazo.
Se espera un pronunciamiento de la Corte Suprema de Estados Unidos este verano sobre una demanda que se centra en la constitucionalidad de una ley de Misisipi que prohíbe la interrupción del embarazo después de las 15 semanas que podría provocar un retroceso de las protecciones legales de Roe contra Wade, el histórico caso, cuya sentencia en 1973 estableció aquí el derecho al aborto.
«Nunca hubo tanto en juego”, advirtió Jenny Lawson, directora Nacional de Campañas de la organización Planned Parenthood Federation of America.
Los defensores del derecho al aborto dijeron que los demócratas tienen que unirse para tomar la delantera en el asunto, pues corren el riesgo de que los republicanos controlen la narrativa, indicó el diario The Hill.
Algunos sondeos muestran que el derecho al aborto es un asunto que mueve entre los votantes demócratas.
Una encuesta de NBC News publicada el 30 de marzo mostró que los demócratas progresistas y moderados estaban unidos en torno a un hipotético candidato que apoyara el caso Roe vs. Wade.
En tanto un sondeo realizado por The Wall Street Journal el 1 de abril reveló que el 55 por ciento de los votantes entrevistados querían que el aborto fuera legal en todos o en la mayoría de los casos.
Sin embargo, la misma pesquisa arrojó que cerca del 48 por ciento de los electores dijo que estaría muy o bastante a favor de la prohibición del aborto a partir de las 15 semanas.
Marjorie Dannenfelser, presidenta del grupo antiabortista Susan B. Anthony List, celebró los resultados, al considerar que evidencian un incremento en el apoyo a las posibles restricciones previo al fallo del Tribunal Supremo.
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