Los legisladores piensan convocar a esa reunión al ministro de Hacienda, Óscar Llamosas, para esclarecer cómo sufragar ese presupuesto, añadió el vicepresidente de esa instancia legislativa Ángel Paniagua.
El fondo de 100 millones de dólares, que subsidiaría la nafta 93 intermedia y el diésel común de 15 importadoras, se concretaría mediante un crédito del Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe, explicó el diputado.
Paniagua, del oficialista Partido Colorado, opinó que a los parlamentarios de esa y otras bancadas les apremia votar el documento, pues “tenemos que cuidar un poco la estabilidad del país”.
“No queremos más cierre de rutas e inconvenientes para los transeúntes”, expresó el diputado en alusión a los cierres de avenidas y autopistas por las protestas de transportistas contra los precios del carburante.
El presidente Mario Abdo Benítez promulgó el 25 de marzo una ley para subsidiar las tarifas de dos tipos de combustible, presionado por dos semanas de manifestaciones de choferes que casi paralizaron al país.
La normativa autorizó a la empresa estatal Petróleos de Paraguay a vender el gasoil tipo III y la nafta de 93 octanos a precios menores de los que los adquirió.
El texto legal prevé que la diferencia entre las sumas es que la entidad oficial venda estos combustibles y el costo de compra será pagada por el Ministerio de Hacienda, mientras la financiación saldrá del Tesoro nacional.
Legisladores opositores rechazan la propuesta de amortización de esos recursos a partir de impuestos que deberán pagar todos los contribuyentes del país para subsidiar los nuevos precios.
El subsidio es también cuestionado por la Unión de Gremios de la Producción, y por la Asociación de Propietarios y Operarios de Estaciones de Servicios, las cuales coinciden en que este no soluciona el problema.
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