“Estamos seguros de que las autoridades de Kiev no podrán escapar de la responsabilidad”, indicó el comunicado en referencia al lanzamiento de un misil Tochka-U contra una estación de trenes en esa localidad de la autoproclamada República Popular de Donetsk (RPD).
Según la administración regional, de los 50 muertos cinco son niños. Un total de 98 personas fueron trasladadas a hospitales en Kramatorsk, incluidos 16 niños, 46 mujeres y 36 hombres.
“Doce de ellos murieron en el hospital, 38 personas murieron en el lugar del suceso, en la estación”, publicó en su sitio en Facebook el jefe de la Administración Militar Regional de Donetsk, Pavel Kirilenko.
El Ministerio de Defensa de Rusia informó que el ataque a Kramatorsk fue perpetrado por una división de las Tropas de Misiles ucranianas desde la localidad de Dobropolie, situada a 45 kilómetros de la urbe, zona que sigue controlada por las unidades de Kiev.
“El análisis del radio de explosión de la ojiva, así como la posición característica de la carcasa de la cola del misil Tochka-U, confirman claramente que fue lanzado desde la dirección suroeste de Kramatorsk”, indicó.
Según el ente militar, los misiles tácticos Tochka-U, cuyos restos fueron descubiertos cerca de la estación de trenes, solo son usados por las Fuerzas Armadas de Ucrania.
Explicó que el objetivo del atentado fue evitar “la salida masiva de residentes de la ciudad para usarlos como escudos humanos y así defender posiciones de las Fuerzas Armadas de Ucrania, como en muchas otras localidades” del país.
La cartera de Defensa denunció que, para culpar al país, las autoridades ucranianas difundieron imágenes de los sistemas Tochka-U que participaron en los ejercicios militares conjuntos de Rusia y Belarús en febrero de 2022.
Subrayó que en las imágenes publicadas se puede observar que los complejos de misiles no pertenecen al gigante euroasiático.
Tras el ataque, el asesor del jefe de la Oficina Presidencial de Ucrania, Alexei Arestóvich, afirmó que “las tropas rusas atacaron con un misil del tipo Iskander la estación de trenes de Kramatorsk”.
Sin embargo, en la declaración emitida poco después el presidente ucraniano, Vladimir Zelensky, donde también culpó a los militares rusos, dijo que el ataque se llevó a cabo con un misil Tochka-U.
El jefe adjunto de las fuerzas de la autoproclamada RPD, Eduard Basurin, dijo esta mañana que inmediatamente después de los hechos desde Kiev comenzaron a decir que el misil fue lanzado por Rusia.
“Pero los medios que tiene la gente, me refiero a los teléfonos, las cámaras, grabaron que había restos de un Tochka-U”, explicó el funcionario de la RPD.
Para el jefe de la RPD, Denís Pushilin, el acto constituyó “otra monstruosa provocación, otro crimen de guerra del régimen de Kiev. Para nosotros todo está claro, el régimen de Kiev no considera a esta gente como propia, no se detiene ante nada”, expresó a la televisora Rusia 1.
El funcionario alertó que este bombardeo no será la última provocación de las Fuerzas Armadas de Ucrania, por lo que llamó a la población “a prepararse y contrarrestar estos crímenes de guerra, si es posible”.
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