El vicepresidente del Consejo de la Federación (Cámara Alta del Parlamento) de Rusia consideró que tales palabras constituyen un estímulo directo a la continuación de las hostilidades por parte de Kiev, reportó la agencia de noticias TASS.
“Esta es solo una declaración terrible, no puedo elegir otra palabra, especialmente cuando proviene de los labios de un alto funcionario en una organización que no es militar por definición”, indicó.
Kosachov manifestó que tal opinión “irresponsable” podría esperarse de de generales o políticos que representen a la OTAN, “pero de labios de uno de los más altos funcionarios de la Unión Europea, como dicen, no encaja en ningún marco”.
En su opinión, en caso de que dicha declaración se implemente por parte de las autoridades de Kiev y de quienes las apoyan, significará nuevas víctimas y pérdida para Ucrania, pero de ninguna manera cambiará la situación en esencia.
Borrell ratificó este lunes su declaración anterior sobre el interés de la UE de buscar una solución del conflicto en Ucrania por la fuerza y ampliar la ayuda militar a ese país, al llegar a una reunión de los ministros de Exteriores del bloque comunitario en Luxemburgo.
“Sí, las guerras se ganan o se pierden en el campo de batalla”, expresó Borrell cuando le preguntaron si estaba dispuesto a confirmar su declaración de que la guerra en Ucrania “debe ser ganada en el campo de batalla”.
Señaló además que los cancilleres de los países de la UE revisarán otra posibilidad de más sanciones a gran escala contra Rusia.
Rusia inició el pasado 24 de febrero una operación militar en Ucrania, luego que las autoridades de las autoproclamadas Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk le solicitaran ayuda para repeler el aumento de la agresión y los intensos bombardeos por parte de Kiev.
Antes, Moscú reconoció la independencia y soberanía de ambos territorios y firmó tratados de amistad, cooperación y asistencia mutua con sus líderes, los cuales incluyeron el establecimiento de relaciones diplomáticas y la ayuda militar.
En su discurso para informar sobre el comienzo del operativo, el presidente ruso, Vladimir Putin, afirmó que el objetivo es proteger a la población de Donbass de los abusos y el genocidio de Kiev durante los últimos ocho años, además de “desmilitarizar” y “desnazificar” Ucrania.
Putin instó a los militares ucranianos a deponer las armas y advirtió a la comunidad internacional sobre la posibilidad de una respuesta inmediata en caso de intentos de intervención externa en el conflicto.
jcm/mml