Un boletín epidemiológico publicado por el Ministerio de Salud revela asimismo que en lo que va de calendario fueron confirmados 184 casos por cada 100 mil habitantes.
Para la vicepresidenta segunda del Consejo Federal de Medicina, Rosylane Rocha, dos factores pueden explicar esta considerable crecida.
En primer lugar, el dengue resulta una enfermedad estacional, con mayor incidencia en los períodos de lluvia y calor.
Y, como este año muchas regiones tuvieron precipitaciones superiores a las esperadas, hubo acumulación de agua, situación favorable a la aparición de focos de la dolencia transmitida por el mosquito Aedes aegypti.
Otra razón, según Rocha, es que el miedo a la Covid-19 hizo que muchas personas buscaran atención médica, aumentando los registros oficiales de casos de dengue, pues al principio los dos padecimientos tienen síntomas similares.
Muy por encima de la media nacional, la región centro-oeste del país presenta una tasa de más de 700 casos de dengue por cada 100 mil habitantes, especialmente en las capitales Goiania, Brasilia y Palmas.
El boletín de la cartera de Sanidad señala que, hasta la fecha, murieron 112 personas, de las 280 que desarrollaron la dolencia infecciosa que se trasfiere a los seres humanos por la picadura de mosquitos hembra.
Los registros quedaron notificados principalmente en los estados de Sao Paulo, seguidos de Goias, Bahía, Santa Catarina y Minas Gerais.
Además, siguen bajo investigaciones más de 170 vidas perdidas que podrían estar asociadas al dengue.
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