El foro Fútbol, pasión y violencia. Reflexiones desde las ciencias sociales, concluye este viernes después de importantes debates entre académicos, sicólogos y dirigentes deportivos quienes expresaron su alarma por un rebrote muy fuerte de la violencia en el deporte de multitudes, lo cual amerita un análisis serio y profundo.
José Antonio De los Reyes, rector general de la UAM, relató que esa violencia ha provocado tragedias mortales en las que pueden encontrarse cerca de 35 sucesos ocurridos entre 1902 y 2022 en una veintena de países de Europa, Asia, África y Latinoamérica,
Citó como ejemplo la más reciente en México el pasado 5 de marzo en el estadio La Corregidora en un encuentro donde los Gallos Blancos del Querétaro recibían al Atlas de Guadalajara.
Dicho foro, con sede en el Auditorio Catalina Eibenschutz de la Unidad Xochimilco, es significativo pues encara un tema multidimensional por sus causas, manifestaciones y consecuencias.
La doctora Alma Luna Olivas, presidenta del Consejo Académico de la Facultad Latinoamericana de la Universidad Policial, detalló que dicha institución trata temas como el abordado en el foro, mediante líneas de investigación para generar políticas públicas en aras de un mejor desempeño de la comunidad.
El doctor Patrick Mignon, académico del Institut National du Sport, de l’Expertise et de la Performance en Francia, destacó que, en el caso de su país, existe una especie de situación de paz en los estadios a pesar de que se han dado incidentes violentos en los que sólo ha habido una persona fallecida en 2010.
Por su parte, Diego Murzi, profesor de la Universidad Nacional de San Martín en Argentina, dijo que la violencia en el futbol en su país es un problema social que ha dejado 346 muertes, 231 desde la vuelta de la democracia y 115 en los últimos 15 años.
Carlos Tomada, embajador de ese país, sostuvo que es un deporte que apasiona como pocos pero acumula hechos lamentables, violentos y luctuosos que tienen tres características: confrontación entre hinchas, enfrentamientos al interior de las barras bravas y la intervención de fuerzas de seguridad a veces victimarias.
Jean-Pierre Asvazadourian, jefe de la misión diplomática de Francia, indicó que el balompié no es sólo un ejercicio corporal, sino que se define como un hecho social total que involucra aspectos económicos, sociales, culturales, políticos, jurídicos, morales y psicológicos en la vida colectiva e individual.
Es un deporte que no conoce fronteras y que de manera paradójica representa una reafirmación de nuestra identidad y pertenencia a un barrio, ciudad o país; no es casualidad que autores reconocidos y distintos hablen de éste como paradigma de investigación, concluyó.
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