Según recordó el Ministerio de Relaciones Exteriores, esa avanzada se encargará de alistar las condiciones del periplo en concordancia con los protocolos establecidos aquí para la lucha contra la Covid-19.
El mes pasado la Cancillería informó que Beijing realizaba las coordinaciones y arreglos pertinentes para la visita de Bachelet.
La agenda de la funcionaria incluye un recorrido por la región autónoma uigur de Xinjiang (noroeste), con fuerte presencia de musulmanes y frecuentemente usada por Occidente para lanzar acusaciones a China sobre la presunta violación de los derechos humanos.
China aseguró que facilitará la visita y el propósito será “promover los intercambios y la cooperación entre las dos partes”, al rechazar cualquier manipulación política al respecto.
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