El togolés ministro de Relaciones Exteriores, Robert Dusey, declaró a la prensa local que las autoridades nacionales están dispuestas a facilitar un diálogo constructivo entre Mali y la comunidad internacional con el propósito de resolver la crisis política en que se encuentra sumido ese país.
Según el canciller recientemente el titular de Exteriores maliense, Abdoulaye Diop, comunicó a la presidencia de Togo tal pedido de mediación.
Ello ocurre cuando las autoridades militares malienses fijaron el período de transición para dar paso a un ejecutivo civil en un período de 24 meses, en tanto la Comunidad Económica de Estados de África Occidental, que integran 15 países, exige celebrar elecciones en un plazo de 12 a 16 meses.
Con anterioridad, tras ser apartado del poder en agosto de 2020 el presidente maliense Ibrahim Abubacar Keita, mandos militares del Consejo de Transición, encabezados por el coronel Assimi Goita, prometieron restaurar el gobierno civil en febrero de 2022.
Sin embargo, en mayo de 2021 Goita y sus acólitos uniformados dieron un nuevo golpe de estado, lo que forzó la salida del gobierno civil interino.
En medio de una creciente inestabilidad política, social y económica, en medio de la Covid-19, Mali es azotado también por la violencia en su territorio, derivada de la presencia de grupos radicales islamitas, entre ellos el Estado Islámico.
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