“Shireen Abu Aqla fue una periodista valiente y profesional. Esta mañana en Jenin, las fuerzas israelíes la mataron a tiros, mientras vestía un chaleco de prensa, y se convirtió así en víctima de la ocupación que cubrió a lo largo de su carrera.
Israel debe rendir cuentas por este grave crimen”, escribió la diputada en su cuenta en Twitter.
Los colegas que estaban con ella informaron claramente que un militar le disparó, confío en esos reporteros y no en el portavoz de las Fuerzas Armadas de Israel, señaló en otro tuit en alusión a la versión castrense.
En similar sentido se pronunció en esa red social el también legislador Mossi Raz, quien destacó que “así es como se ve la ocupación” israelí en los territorios palestinos.
Conocida por sus posiciones ultraderechistas, la ministra israelí del Interior, Ayelet Shaket, replicó a Raz.
“Así no es como se ve la ocupación, así es como se ve la falsa propaganda palestina (…) Respaldaremos a nuestros combatientes y continuaremos luchando contra el terrorismo sin concesiones”, expresó Shaket, firme partidaria de la colonización judía en Cisjordania.
¿Cuál es la falsa propaganda palestina? No determiné quién la mató. La ocupación es una situación violenta que trae bajas en ambos lados y debe terminar, respondió Raz.
Según el periodista palestino Ali Samoudi, que está en el lugar de los hechos y fue herido en la espalda, los militares sabían dónde se encontraba el grupo de comunicadores, quienes estaban bien identificados.
Las fuerzas de ocupación nos atacaron directamente, aseguró Samoudi, quien desmintió así al brigadier Ran Kohavel, vocero del ejército israelí.
Ese ese lugar no había hombres armados ni enfrentamientos, y lo sabían los uniformados, recalcó.
Abu Aqla, de 51 años, trabajaba para la televisora qatarí Al Jazeera, cuyos directivos condenaron el crimen y responsabilizaron por el mismo a las autoridades de Tel Aviv.
Tras el incidente, tanto el gobierno palestino, como partidos, organizaciones defensoras de los derechos humanos y funcionarios públicos denunciaron su muerte y reclamaron sanciones para Israel.
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