La indagación, efectuada por la firma Opción Consultores para medir impactos de la transcurrida emergencia sanitaria, se orientó a evaluar la recuperación en los sectores y las secuelas en el bienestar integral de la población.
En febrero de 2022, solo un 34 por ciento evalúo su situación socioeconómica de buena, y apenas un 3,0 de muy buena, mientras la franja de inestable a muy mala abarcó un 59 por ciento.
Un 12 por ciento de los entrevistados declaró haber estado en situación de inseguridad alimentaria leve o significativa durante 2021, comparado con 2020, una relativa mejoría debido a la reducción de las restricciones para prevenir contagios de la enfermedad.
Las personas entrevistadas perciben que la pandemia tuvo un impacto negativo sobre la salud mental de los niños y adolescentes, en la etapa de suspensión de clases y para una amplia mayoría estos problemas disminuyeron con la presencia en aulas.
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