Según Hultqvist, los negociadores descubrirán cuál es el verdadero problema y cómo resolverlo para encontrar un compromiso.
En la víspera, Helsinki anunció que Finlandia tiene la intención de unirse a la alianza atlántica, pero esta decisión debe ser ratificada por el Parlamento.
Luego, la titular del ministerio de Relaciones Exteriores de Suecia, Ann Linde, afirmó que el gobernante partido Socialdemócrata, está a favor de ingresar al bloque militar.
El 13 de mayo, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, aseveró que su nación se opone a la entrada de Suecia y Finlandia en la OTAN, ya que ambos países tienen miembros del Partido de los Trabajadores del Kurdistán.
Mientras, el canciller turco, Mevlut Cavusoglu, manifestó en Berlín que la mayoría de la población turca se oponía a la adhesión de Suecia y Finlandia a la alianza atlántica y pidió a su Gobierno que la bloqueara.
De acuerdo con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, la alianza cree en la posibilidad de llegar a un entendimiento con Ankara sobre este tema.
El proceso de aceptación de un nuevo miembro al organismo está controlado por el Consejo del Atlántico Norte, el principal órgano de toma de decisiones políticas de la alianza.
Si se presenta una solicitud de membresía, primero será considerada por el consejo, luego de lo cual el acuerdo debe ser ratificado a nivel nacional en los 30 países de la alianza.
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