Durante su encuentro en la sede de la Cancillería en esta capital con la subsecretaria general de las Naciones Unidas para Asuntos Humanitarios, Joyce Misoya, el Canciller pidió que se cumplan los principios de la acción humanitaria y se comprometa con la neutralidad y la independencia.
Lo anterior contribuye a garantizar los servicios básicos y prestar ayuda a sus beneficiarios reales sobre la base del pleno respeto a la soberanía e integridad del territorio de Siria y de conformidad con las resoluciones pertinentes del Consejo de Seguridad, manifestó.
Denunció que la principal causa del sufrimiento del pueblo sirio se debe a los efectos inhumanos de las medidas coercitivas unilaterales impuestas por Estados Unidos y sus aliados occidentales sobre el pueblo sirio.
Exhortó a la ONU a que se esfuerce por poner fin a estas políticas que calificó de inmorales y que contradicen el Derecho Internacional y la Carta de las Naciones Unidas, y también afectan el desempeño de las tareas humanitarias de las Naciones Unidas en Siria.
Por su parte, la funcionaria de la ONU manifestó su interés en asegurar la financiación necesaria para el trabajo humanitario en Siria, y consideró que el país árabe se encuentra entre las prioridades del trabajo humanitario en las Naciones Unidas.
Agradeció al gobierno sirio las facilidades que brinda para el éxito del trabajo de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios.
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