Según la entidad internacional, hasta la fecha no se reportó ninguna muerte mientras permanecen bajo investigación otros 28 individuos.
“La situación está evolucionando y la OMS espera la identificación de más enfermos a medida que la vigilancia alcance otros territorios», añadió la información.
Agregó asimismo que la identificación de aquejados y sospechosos de viruela símica sin vínculos directos de viaje a un área endémica representa un evento muy inusual.
Todavía no ha podido establecerse el foco y ruta de contagio del actual brote y, hasta la fecha, todos los casos cuyas muestras fueron confirmadas por PCR se corresponden a la infección de la cepa de África Occidental, apuntó igualmente.
El continente europeo ostenta la mayor infestación con reportes en Reino Unido, España, Portugal, Alemania, Bélgica, Francia, los Países Bajos, Italia y Suecia.
Fuera de esa área continental, también hay presencia del virus en Estados Unidos, Canadá y Australia.
La viruela del simio se propaga a través del contacto personal, y la atención debe centrarse en los individuos aquejados y en sus contactos cercanos, aclaró la OMS.
“Quienes interactúan estrechamente con alguien enfermo corren un mayor riesgo de infección: esto incluye a los trabajadores de la salud, los miembros del hogar y las parejas sexuales”, remarcó.
El virus, añadió, es endémico en algunas poblaciones animales de varios países, sobre todo de zonas remotas de África central y occidental, lo que provoca contagios ocasionales entre la población local y los viajeros.
Acorde con la entidad, no existen tratamientos ni vacunas específicas contra la infección, aunque se pueden controlar los brotes.
El padecimiento se caracteriza en sus inicios por la aparición de fiebre, cefalea intensa y dolores musculares mientras que, en un segundo momento, se manifiesta una erupción cutánea de color rosáceo con una evolución de lesiones de base plana a ampollas llenas de líquido.
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