El documento fue rubricado por el jefe de la Sczone, Yahia Zaki, y el presidente ejecutivo y director ejecutivo de H2 Industries, Michael Stusch.
Según el acuerdo, la planta se construirá en el área de East Port Said con una capacidad de producción de 300 mil toneladas de hidrógeno verde al año, lo cual eliminará cuatro millones de toneladas de residuos sólidos cada 12 meses.
Durante la ceremonia, Zaki subrayó los esfuerzos realizados por la autoridad para atraer inversiones a la zona económica.
Por su parte, el directivo de H2 Industries afirmó que este proyecto tiene el doble beneficio de crear hidrógeno limpio y valioso, al tiempo que aborda el importante tema de la gestión de desechos.
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