De acuerdo con los miembros del panel, ese día marcará el inicio de una serie de audiencias en el momento de mayor teleaudiencia, 20:00, hora local, lo que constituye una muestra de que la comisión está ansiosa por llegar a un amplio sector poblacional y transmitir hasta qué punto la democracia estuvo en juego el 6 de enero del 2021.
Se reconstruirán los sucesos a partir de las innumerables declaraciones recopiladas en los últimos meses por parte de exfuncionarios de la era de Donald Trump (2017-2021) y otras pruebas reunidas, explicó Molly Reynolds, politóloga y miembro del equipo de investigación de Estudios de Gobernanza en Brookings Institution.
El reto consiste en presentar un caso cautivador para un público amplio, en particular para aquellos que creen que ya saben lo que ocurrió aquel día o piensan que están preparados para seguir adelante, agregó.
Según un sondeo de la Universidad de Massachusetts Amherst, la mayoría de los estadounidenses quieren reflexionar sobre ese día, aunque no hay mucha desventaja con respecto a quienes no desean conocer más detalles sobre el asalto.
Mientras que el 52 por ciento de los adultos encuestados dijo que es importante saber más sobre lo ocurrido, el 48 por ciento señaló que era «hora de pasar página», y la división es casi totalmente partidista.
«Creo que el comité tendrá dificultades para comunicar los mensajes debido al tipo de entorno informativo segregado en el que se encuentra gran parte del público», dijo a la publicación The Hill el codirector del Centro Reiss sobre Derecho y Seguridad de la Facultad de Derecho de la Universidad de Nueva York, Ryan Goodman.
No obstante, lo visual de una audiencia pública solemne, los testimonios en vivo, los videos del suceso llamarán la atención de todos los espectadores, agregó.
Para los analistas, el hecho de que la audiencia se celebre en horario pico demuestra que la comisión no solo quiere llegar a quienes ven el ataque como un grave asalto a la democracia, sino también a los independientes e incluso a los conservadores, que escuchan a los líderes republicanos tachar la pesquisa de cacería de brujas partidista.
El 6 de enero del 2021, una turba de seguidores de Trump irrumpió en el Capitolio, en Washington D.C., para impedir la victoria del entonces candidato y rival Joe Biden, tras los insistentes y falsos reclamos del exmandatario sobre un fraude electoral en la contienda de noviembre del 2020.
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