Durante una reunión este viernes, el primer ministro Anthony Albanese reconoció que tiene un impacto negativo en la capacidad hospitalaria la falta de trabajadores en la atención primaria y en el sistema de cuidado de ancianos.
«Nuestro sistema hospitalario en este momento tiene personas que deberían ser atendidas por su médico de cabecera local, pero ( ellos) simplemente no están disponibles», dijo Albanese.
Agregó que personas de la tercera edad requieren actualmente atención sanitaria en los hospitales por la falta de enfermeras y otros profesionales en los residencias para ese grupo etario.
Por otra parte, el secretario del Sindicato de Empleados de Ambulancias de Australia, Brett Adie, calificó de punto crítico la carencia de paramédicos en Mildura, territorio de Nueva Gales del Sur.
De acuerdo con Adie, esos profesionales están bajo una considerable presión por las largas horas de trabajo, el exceso de turnos adicionales, y las pérdidas de los días libres o de las vacaciones anuales.
La falta de control de la pandemia golpea aún más al sector sanitario australiano, que este viernes acogió más de 30 mil nuevos casos de Covid-19.
En un intento por solventar el problema, el gobierno acordó extender hasta finales de 2022 el financiamiento para el enfrentamiento a la mortal enfermedad.
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