Horas antes, Araújo, considerado uno de los mayores especialistas en pueblos aislados del país, tuvo un conmovedor velorio en el cementerio Morada da Paz, en Paulista, en el Gran Recife, la principal región metropolitana de la división territorial.
El portal G1 asegura que, además de familiares y amigos, originarios de las etnias xucuru y pankararu prestaron homenajes al pernambucano.
Antes de la cremación, chamanes de la etnia karaxuwanassu hicieron un último ritual, con cantos de despedida, para que el indigenista «sea bien recibido en el mundo espiritual». Las mujeres incluso pusieron un tocado de plumas sobre el ataúd.
Durante el velatorio, sobre el féretro cerrado, la familia colocó también una camisa de la Unión de los Pueblos Indígenas del Valle del Javari, región donde Araújo actuó como servidor de la Fundación Nacional del Indio.
«Nos despedimos de Bruno con el corazón lleno de gratitud por haberlo tenido en nuestras vidas. La vida de Bruno fue de coraje, dedicación y fidelidad a la causa de los indígenas», dijo la familia a través de una nota leída por la cuñada Thany Rufino.
Los cuerpos de Araújo y Phillips, colaborador del diario The Guardian, que se encontraban en Brasilia, fueron entregados ayer a las respectivas familias.
Ambos desaparecieron el 5 de junio, mientras hacían un viaje en la tierra indígena del Valle de Javari, desde donde partieron hacia Atalaia del Norte, aunque no llegaron a su destino.
Sus despojos aparecieron el 15 de junio en un área señalada por el pescador detenido Amarildo da Costa Oliveira, conocido como Pelado, quien confesó haber enterrado los cadáveres próximo a Atalaia do Norte, en un bosque a orillas del río Itacoaí. Los cuerpos fueron descuartizados, quemados y luego arrojados a una zanja.
Otro sospechoso, ya detenido, es el hermano de Pelado, Oseney Oliveira, apodado Dos Santos.
La Policía Federal también informó el pasado domingo que, además de los tres detenidos, otros cinco sospechosos fueron identificados por estar implicados en encubrir los restos de las víctimas.
Tal identificación de los desechos fue posible por el examen de arcada dental hecho por los expertos del Instituto Nacional de Criminalista de la PF en Brasilia.
En un comunicado, los peritos señalaron que las técnicas permitieron instituir que el indigenista recibió tiros en la cabeza y en el tórax, y el comunicador en el pecho.
La familia del periodista informó que las ceremonias fúnebres y la cremación de su cadáver serán el domingo, en el cementerio Parque da Colina, en Niterói, distrito de Río de Janeiro.
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