En su actualización de informe general, la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) detalla que solo en las pasadas 24 horas atendieron 19 eventos adversos en los departamentos de Alta Verapaz, Baja Verapaz, Chimaltenango, Chiquimula, Escuintla, Huehuetenango, Jalapa, Quiché, San Marcos, Sololá, Suchitepéquez, Totonicapán y Zacapa.
A nivel nacional, suman 755 incidentes, 23 fallecidos, cuatro desaparecidos y seis mil 287 evacuados debido, principalmente, a inundaciones, deslizamientos de lodo y tierra, crecidas repentinas de ríos y socavamientos, entre otros.
El balance registra, asimismo, tres mil 59 viviendas con daños, entre leves, moderados y severos, 129 escuelas, 185 carreteras, cuatro edificios y 20 puentes afectados.
Además, hay cuatro carreteras y nueve puentes totalmente destruidos, una situación que expertos atribuyen no solo al hecho de que Guatemala esté entre los países más vulnerables al cambio climático, sino también a la inexistencia de planificación en la expansión de ciudades y ocupación de zonas de alto riesgo.
«La historia ha sido la misma en los últimos años, las autoridades, municipales o del Gobierno central salen a apagar fuegos y a reparar puentes, calles o carreteras, muchas veces con la implementación de estados de excepción para hacer compras sin licitar», advirtió el medio Prensa Libre en un análisis titulado Fenómeno de La Niña agrava vulnerabilidad del país por falta de políticas de prevención.
Un ejemplo reciente es el agujero formado en el kilómetro 15 de la ruta al Pacífico, en el municipio de Villa Nueva, donde desde hace varias semanas no hay tránsito vehicular con grandes afectaciones a usuarios de esa ruta clave también para la economía, pues por ahí se moviliza un buen porcentaje del Producto Interno Bruto del país.
Varios informes de la Conred y de ingenieros, aún no determinan qué hacer para restaurar el paso, mientras crece el tamaño del socavamiento por día y sus daños se extienden a áreas aledañas.
El Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología alertó desde inicios de abril que los meses iniciales del invierno traerían lluvias excesivas, más tormentas o huracanes (al menos 19), y ahora temen que emergencias como estas se repitan o sean peores en la segunda temporada húmeda.
La ruta Interamericana continúa siendo una de las más vulnerables a derrumbes como el ocurrido en el km 24 el pasado domingo, y aún sin paso en la zona.
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