En colaboración con la Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz), la investigación se realizó con datos recogidos en el Sistema de Información sobre Mortalidad del Ministerio de Sanidad.
Desde el comienzo de la crisis sanitaria por el patógeno en febrero de 2020, el país notificó mil 439 muertes de pequeños de esa edad a causa de la enfermedad.
En 2020, se registraron 599 y el pasado año, cuando la letalidad de la dolencia aumentó en toda la población, el número de víctimas infantiles saltó a 840. La mitad de las vidas perdidas se concentra en la región noreste.
Datos preliminares divulgados por el Boletín Epidemiológico de la cartera indican que el promedio de dos muertes diarias se mantiene este año.
Entre enero y el 13 de junio, el gigante suramericano rastreó un total de 291 óbitos entre infantes menores de cinco años por el virus.
La observación de estos dos primeros años de pandemia en Brasil muestra que los niños de 29 días a un año de vida son los más vulnerables.
Ante los hechos, la profesora y epidemióloga Patricia Boccolini, de la Facultad de Medicina de la ciudad Petrópolis, al norte de Río de Janeiro, alerta para la urgencia en la aprobación de la vacuna para esa franja etaria.
Detalla que los bebés de esta edad representan casi la mitad de las muertes registradas entre menores de cinco años y pide rapidez para llevar la protección de las vacunas a párvulos y niños, especialmente de seis meses a tres años.
«Cada día que pasamos sin vacuna contra Covid-19 para menores de cinco años, Brasil pierde dos niños», remarca Boccolini.
La televisora CNN Brasil asegura que la farmacéutica estadounidense Pfizer informó que prepara la documentación para solicitar a la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria el aval para la liberación de la vacuna antiCovid-19 para criaturas mayores de seis meses hasta infantes de cinco años.
Hasta la fecha, Brasil acumula 670 mil 532 defunciones y 32 millones 130 mil 316 contagios por Covid-19.
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