El Poder Ejecutivo introdujo al proyecto de ley correspondiente un artículo para favorecer los monopolios privados de medios de comunicación y derogar una legislación del gobierno del Frente Amplio, presidido por José Mujica, en 2014 que limita esas concentraciones de propiedades y fomenta la producción nacional.
Según destacó el semanario Búsqueda, la coalición de derecha en el poder quiere “enviar una señal política” para agilizar la aprobación de la nueva Ley de Medios, que se encuentra estancada hace más de dos años y que generó cuestionamientos de referentes en la temática.
Para adelantar en ese cuestionado empeño, el presidente de la república, Luis Lacalle Pou, habilitó mediante un decreto a cinco operadores privados de cables para suministrar servicios de internet y, de hecho, desmonopolizar a la estatal Administración de Telecomunicaciones Antel.
A causa de ello, representantes del sindicato de dicha empresa, por sus siglas Sutel, presentaron a la Presidencia de la nación un recurso contra dicha resolución.
La intendenta de Montevideo y expresidenta de Antel, Carolina Cosse, calificó ese acto de antipatriota y cuestionablemente legal, y lo describió de “vaciamiento de una empresa que en la última década invirtió fuertemente en una infraestructura de primer mundo en telecomunicaciones”.
En paralelo, la ministra de Finanzas, Azucena Arbeleche, entregó al Poder legislativo la propuesta presupuestal, de la que dijo: prevé aumentos priorizados de recursos para la seguridad pública, bajo fuerte crítica ciudadana, la educación, con partidas todavía insatisfactorias, y recuperación salarial parcial de empleados públicos.
Al respecto, el senador frenteamplista Oscar Andrade describió un contexto donde la economía uruguaya alcanza récord de crecimiento y exportaciones y coincide con el deterioro de temas tan sensibles como los salarios, jubilaciones, la calidad de vida de los uruguayos, sobre todo niños en la inseguridad alimentaria.
Andrade se refirió a la existencia de «una situación social muy dramática» que, a su entender, quedó demostrada con el «aluvión» de personas que se inscribieron en la última convocatoria de los Jornales Solidarios, programa paliativo de empleos temporales por sorteos.
Más de 150 mil uruguayos desempleados se inscribieron en el sorteo de 10 mil jornales solidarios ante la falta de fuente de trabajo.
Durante la semana el Sindicato Único de la Construcción de Uruguay (Sunca) emprendió un paro general parcial con movilizaciones en todo el país en reclamo de trabajo, vivienda, seguridad social y negociación colectiva.
Por último una mayoría del 51 por ciento de uruguayos tiene una percepción mala o muy mala de la situación del país, a tenor de una encuesta de la reconocida consultora de opinión pública Factum.
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