En rueda de prensa ofrecida desde la sede del Ministerio Público, el titular ofreció detalles sobre el secuestro, desaparición y posterior asesinato del reconocido docente, sociólogo y político de izquierda, delitos por los cuales hay 13 personas detenidas e imputadas.
Saab señaló a la esposa del profesor Carlos Lanz, Maxiorisol Cumare, como autora intelectual del crimen, quien habría pagado la suma de ocho mil dólares a su amante, identificado como Glen Castellano, para contratar los sicarios encargados de cometer la acción criminal.
Las confesiones de Castellanos, acogido voluntariamente a la figura de delator, fueron verificadas y autenticadas ante los organismos judiciales, y grabadas por el involucrado ante las cámaras del Ministerio Público, precisó el fiscal general.
De acuerdo con las declaraciones del implicado, la esposa de la víctima “estaba harta de que Lanz fuese un obstáculo para sus negocios de corrupción con distintos proveedores” en el manejo de partidas presupuestarias del Instituto Nacional de Capacitación y Educación Socialista (Inces) en Maracay, estado de Aragua.
La estrategia de la trama criminal giró en torno a simular un hecho de supuesta desaparición forzada bajo falsos positivos, incluido el intento de acusar al Estado venezolano de encubrir los hechos por motivos políticos, indicó Saab.
Desde las primeras investigaciones del Ministerio Público, se determinó que el aparente secuestro de Carlos Lanz se realizó sin violencia y en forma pacífica, por lo cual se presumía que este salió de su vivienda bajo engaño por una persona de su entera confianza.
El fiscal general de Venezuela condenó lo atroz del crimen de Carlos Lanz; luego de ser ultimado, sus asesinos desmembraron el cadáver y arrojaron los restos a nueve cerdos como alimento para eliminar cualquier vestigio de la víctima.
Durante las investigaciones del caso se llevaron a cabo más de 200 diligencias, entre ellas entrevistas al círculo familiar y personas allegadas, experticias forenses, análisis de telefonía, revisión de movimientos migratorios, pruebas de polígrafo, inspecciones técnicas a su vivienda y otros sitios.
Asimismo, los investigadores analizaron grabaciones con cámaras de seguridad, análisis de perfiles financieros, así como la verificación en puertos y aeropuertos, y despliegues en los estados de Guárico, Bolívar, Aragua, Caracas y Cojedes.
Hasta la fecha, además de Maxiorisol Cumare y Glen Castellanos, otras 11 personas están procesadas por los delitos de sicariato, asociación para delinquir, simulación de hecho punible y encubrimiento.
A raíz de su desaparición en agosto de 2020, el Partido Socialista Unido de Venezuela destacó en un comunicado el valioso el aporte de Carlos Lanz a las bases teóricas y políticas de la organización, tanto por su ejemplo militante de vida, como por las investigaciones en materia de guerra no convencional y operaciones psicológicas.
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