Antonio Banderas, por supuesto, lejos del protocolo de las estrellas de Hollywood, sin protección especial, se mueve en Málaga justo como pez en el agua, como gran promotor de la cultura, del arte y, probablemente, con parte de sus mayores inversiones en la urbe que lo vio nacer.
Cantante, productor, director y perfumista, además, José Antonio Domínguez Banderas, simplemente Antonio, a sus casi 62 años de edad, tiene prácticamente una obsesión en colocar en el mapa mundial de la cultura a la hermosa Málaga, de hecho, una de las ciudades de espectacular crecimiento en España en los últimos seis años.
“Me uno a un montón de gente que ya venía haciendo su trabajo (…) a veces las cosas llegan por lugares inesperados. Nuestro alcalde Paco de la Torre es un humanista comprometido con dar un perfil diferente a Málaga (…), ya tenemos 39 museos, el Thyssen, el Picasso, Pompidou, el Paseo Larios sin autos (…)”, comentó en diálogo con Prensa Latina.
Su gran salto a la fama en Hollywood lo dio en 1998 con La máscara del Zorro, al lado de Catherin Zeta-Jones y Anthony Hopkins. Luego alternó con el cine hispano de la mano de Pedro Almodóvar (La piel que habito, Dolor y gloria) o realizadores del nivel del Brian de Palma, Woody Allen, Robert Rodríguez o Richard Donner.
El teatro Soho, dirigido junto a su hermano Javier, es su pasión del momento. Levantado con un gusto exquisito y el detalle de que cada una de las poco más de 800 butacas tiene que ser visible la puesta en escena, espera estrenar una obra en octubre.
A otra inquietud de Prensa Latina sobre sus ideas futuras con el cine latinoamericano, Banderas apuntó que tiene una película, “Competencia oficial”, dirigida por los argentinos Mariano Cohn y Gastón Duprat, y otros dos proyectos con los mismos autores.
“Un trabajo para televisión y otro largometraje con Duprat y Cohn, “Carga peligrosa”, estén en mi horizonte, Pero con América Latina ya participé en muchos rodajes (siete filmes) en México, donde viví casi tres años y medio en distintos lugares”, precisó.
Con el Soho, una iniciativa no lucrativa, espera hacerse cargo del boom del teatro actualmente, que de momento le gana el pulseo al cine, marcado por el distanciamiento que implicó la Covid-19 y las plataformas existentes.
Yo pienso que los espectáculos en vivo van a acaparar la atención, aunque al mismo tiempo confío en que el cine encuentre fórmulas para no decaer el entusiasmo de ir a las salas. En Málaga estamos empezando algo para dar a la ciudad un plus y potenciar más su ambiente, su cultura, analizó Antonio Banderas.
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