Casi dos decenas de personas resultaron heridas, dos de ellas fallecidas mientras eran atendidas en hospitales, cuando desconocidos irrumpieron en un bar del suburbio capitalino de Soweto y en dos de localidades del este del país y abrieron fuego graneado contra los parroquianos.
Nadie ha sido arrestado e investigadores siguen en busca de pistas, dijo a la prensa el comisario policial del distrito de Orlando, en el suburbio de Soweto, notorio por el levantamiento estudiantil antiapartheid que, en 1976, dejó un saldo de 176 negros y dos blancos muertos.
Acciones similares contra bares sudafricanos, también carentes de explicación, están al alza desde fines de junio último cuando 26 personas murieron envenenadas en un bar de la provincia de Cabo Oriental (sureste) tras ingerir bebida adulterada.
mgt/msl