Así, en el primero de esos mercados el barril de petróleo Intermedio de Texas (WTI), el de referencia en Estados Unidos, se contrajo 8,25 dólares, es decir, un 7,9 por ciento, y se situó en 95,84 dólares.
Expertos comentaron que este tipo de crudo ligero se ubicó nuevamente por debajo del nivel de los 100 dólares el tonel, ante la posibilidad de una menor demanda de oro negro.
También sufrió una abrupta caída de la cotización, el crudo Brent del mar del Norte, el referente en Europa, el cual descendió este martes 7,61 dólares, o sea, un 7,10 por ciento, y se fijó en 99,49 dólares el tonel.
Jeffrey Halley, analista de la firma Oanda, consideró que los mercados siguen divididos entre los temores a una recesión, que torpedean el crecimiento y consecuentemente el consumo de crudo y la realidad en la que aún es muy ajustada la oferta y la demanda.
Fuentes de ambos mercados dijeron que las predicciones formuladas hoy por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), relativas a un aumento del consumo de oro negro del 2,7 por ciento en 2023 no impactaron en el ánimo de los inversores.
Influyeron negativamente además, nuevas medidas restrictivas chinas ante la aparición de más casos de Covid-19 y que amenazan con reducir la demanda de combustibles.
Mientras, en Nueva York los contratos de futuros de gas natural para suministrar en agosto, disminuyeron 26 centavos, hasta los 6,16 dólares.
Igualmente, los de gasolina con fecha de entrega en ese mes mermaron 19 centavos, a 3,26 dólares el galón.
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