Mogae, al frente de una veintena de observadores, llegará a Nairobi, la capital keniana, el 2 de agosto, una semana antes de la justa para la que están convocados unos 22 millones de electores.
Conocido como el Grupo de Observadores de la Commonwealth, la entidad representa al Reino Unido y sus antiguas colonias, así como a Mozambique, Ruanda, Togo y Gabón. La misión estará integrada además por la periodista y presidenta de la Escuela de Estudios Orientales y Africanos del Reino Unido, Zeinab Badawi, y el jurista James Ogoola, antiguo juez principal del Tribunal Superior de Uganda.
Otros implicados son la directora general de la Fundación de la Commonwealth en Australia, Anne Gallagher, el exalcalde de la ciudad de Belice Darrell Bradley y el Representante Especial Adjunto de la Organización de Naciones Unidas (ONU) para Costa de Marfil Simon Munzu.
Igualmente, se encuentran la exlegisladora gambiana Halifa Sallah, el excomisionado de Derechos Humanos en Malasia Jerald Joseph y el excanciller de Malta Evarist Bartolo.
Completan la relación la directora del Centro para la Democracia y el Desarrollo de Nigeria Idayat Hassan, el expresidente de la Comisión Electoral Nacional Independiente de Nigeria Attahiru Jega y la exministra de Vivienda de Nueva Zelanda Maryan Street.
A menos de tres semanas para las elecciones presidenciales no hay un claro favorito entre las cuatro fórmulas aceptadas por la Comisión Electoral Independiente, unido a la campaña virulenta que hace presagiar situaciones de violencia como la vivida tras el proceso de 2017 cuando se alzó con la reelección el presidente Uhuru Kenyatta.
Los principales contendientes: Raila Odinga y William Ruto marchan en virtual empate técnico, de acuerdo con la mayoría de las encuestas.
Odinga es el abanderado de la coalición Azimio la Umoja (Búsqueda de la Unidad)-Una Kenya y el hasta hace poco vicepresidente Ruto compite por la Alianza Kenya Kwanza.
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