Al intervenir en el Diálogo Climático de Petersberg, celebrado en Alemania, el mandatario destacó el impacto de ese flagelo en este continente, que sufre la desertificación, escasez de agua, el aumento del nivel del mar, inundaciones y lluvias torrenciales.
Las recientes crisis alimentaria y energética exacerbaron los desafíos que enfrentan los países africanos por sus limitadas capacidades y financiamiento disponible, manifestó, según un comunicado oficial.
El Sisi pidió adoptar un enfoque integral que tenga en cuenta las condiciones económicas y de desarrollo de cada país, en especial los africanos.
Entre los desafíos que sufren las naciones en vías de desarrollo citó la acumulación de deuda, el escaso flujo de fondos financieros y el impacto negativo de la pandemia de la Covid-19.
Recordó que Egipto será el anfitrión de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, que tendrá lugar en noviembre venidero en el balneario de Sharm El-Sheikh.
El cambio climático se convirtió en una amenaza existencial en la medida en que ya no es posible posponer la implementación de las promesas y compromisos relacionados con el tema, subrayó.
La actual ola de calor que vive Europa es una buena prueba de la veracidad de ello, resaltó.
El presidente instó a redoblar los esfuerzos para implementar el Acuerdo de París y los compromisos adquiridos.
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