Lo he meditado mucho tiempo, durante año y medio. He hablado con mi equipo, con la FIDE y con Ian (Nepómniachtchi), y la conclusión es que no estoy motivado para jugar otro match, que no tengo ninguna inclinación a jugarlo y que, sencillamente, no voy a jugarlo, explicó.
A través del podcast «The Magnus Effect», el campeón del mundo hizo oficial lo que venía insinuando desde diciembre pasado, cuando batió a Nepo en el Mundial de Dubai.
Si el aspirante es otro distinto de (el joven francés de origen iraní Alireza) Firouzja es improbable que juegue el próximo Mundial, adelantó hace unos meses.
Según el prodigio nórdico durante el reciente Torneo de Candidatos que concluyó en Madrid el 4 de julio pasado, se reunió con el presidente de la FIDE, el ruso Arkady Dvorkovich.
Yo estaba allí para decirles que no iba a defender mi título en el próximo Mundial y tuvimos una pequeña discusión. Ellos hicieron algunas sugerencias, con algunas de las cuales yo estaba de acuerdo y con otras no, reveló.
Desde que en 1975 lo hizo el genial estadounidense Bobby Fischer, ningún otro campeón mundial de ajedrez había renunciado a defender su corona.
Carlsen, de 31 años, arrebató la corona al indio Viswanathan Anand, en 2013, y la defendió con éxito contra el propio Anand, el ruso Sergey Karjakin, el estadounidense Fabiano Caruana y Nepomniachtchi.
No obstante, su decisión de no defender su condición de rey del juego ciencia no significa que vaya a retirarse.
Quiero seguir siendo el mejor del mundo sin preocuparme del Mundial, aclaró.
Así las cosas, Nepo y Ding se batirán por el título mundial en la primavera de 2023, en una sede todavía por determinar.
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