Nuestro objetivo es tender puentes de comunicación con los expatriados e instarlos a retornar al país y establecer proyectos de fomento e inversiones aprovechando las facilidades ofrecidas por las nuevas leyes, dijo la ministra de Fomento, Diala Barakat, en su intervención en un foro en la ciudad norteña de Alepo.
Destacó que los nacionales sirios enriquecieron las culturas de los países donde residen, y además, contribuyeron a romper el injusto bloqueo político y económico impuesto a su país natal.
Alepo, Homs, Damasco y todas las provincias sirias tienen sus puertas abiertas para cada expatriado que quiere retornar y aportar a la reconstrucción del país e impulsar el proceso de producción, agregó la titular.
A su vez, el jefe de la Cámara de Industria de Alepo, Fares Al-Shihabi, hizo un llamado a todos los industriales que tuvieron que salir del país a principio de la guerra para regresar y rehabilitar sus plantas y aprovechar el ambiente propicio para las inversiones.
Reveló que 19.000 instalaciones industriales han vuelto a funcionar en Alepo desde su liberación en 2016.
No hay cifras exactas sobre el número de sirios que emigraron antes o durante la guerra pero se estiman en millones y residen principalmente en Turquía, Egipto, Jordania, Europa y América Latina. mv/fm