De acuerdo con las declaraciones ministro federal de Salud, Jean-Yves Duclos, el gobierno utilizará ocho millones para financiar la distribución de kits de autodiagnóstico, que pueden adquirirse de forma anónima y usarse en el hogar.
Especificó que el monto restante se destinará a expandir las pruebas en comunidades aisladas del norte del país.
«Sabemos que el VIH se puede prevenir, pero las tasas de infección siguen siendo altas en Canadá y en otros países. Brindar a las personas acceso a pruebas, tratamiento y atención puede ayudar a revertir esta tendencia. Eliminar las barreras es la clave para poner fin a la pandemia del SIDA”, dijo Duclos a la prensa.
Reveló además cómo el acceso a las pruebas, y el tratamiento que permite combatir el padecimiento, se torna más difícil en algunas comunidades como las indígenas.
El anuncio aconteció durante la celebración de la XXIV Conferencia Internacional sobre la enfermedad, celebrada en esta ciudad desde el pasado 29 de julio y hasta hoy.
Acorde con estimaciones gubernamentales, cerca de 63 mil personas viven con VIH en Canadá.
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