Los abogados de la exmandataria anticiparon hace más de dos meses la posibilidad de su apresamiento, por presuntamente recibir dinero para su campaña, en infracción a la ley, de un banquero de origen venezolano.
El propósito de la aportación económica para su campaña era conseguir un cambio de ley para beneficiar su institución bancaria.
Vázquez-Garced advino a la gobernación de Puerto Rico, cuando ocupaba el cargo de ministra de Justicia, tras la salida forzada de Ricardo Rosselló Nevares en el verano de 2019, luego de 14 días de levantamiento popular.
La portavoz del FBI, Limary Cruz-Rubio, confirmó que se emitieron otras dos órdenes de arresto junto a la de la exmandataria, tal como lo había adelantado en un tuit la periodista Melissa Correa.
El apresamiento de Vázquez-Garced, quien hace meses debió entregar su teléfono móvil a requerimiento del FBI, se produjo en su residencia en una urbanización de un suburbio de clase media alta de San Juan.
Este arresto es un golpe al anexionista Partido Nuevo Progresista (PNP), que controla la gobernación de Puerto Rico a través de la figura de Pedro R. Pierluisi, que la derrotó en las internas.
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