Durante las últimas semanas, expertos de la Universidad de Bar Ilan comenzaron a estudiar una zona llamada Khirbet Tibnah, cerca del poblado palestino de Nabi Salih.
Sus habitantes aseguran que los trabajos se realizan en terrenos de propiedad privada, pero la casa de estudios los considera estatales al escudarse en una decisión de la Administración Civil, la autoridad militar israelí encargada de las labores burocráticas en la ocupada Ribera Occidental, detalló la publicación.
Citada por el rotativo, la activista Bassem Tamimi afirmó tener documentos que prueban su propiedad sobre esa tierra.
Haaretz resalta que las excavaciones arqueólogas israelíes en Cisjordania son inusuales, entre otras razones porque las revistas internacionales especializadas en el tema rechazan publicar los resultados de esas pesquisas en territorios ocupados debido a que violan el derecho internacional.
El segundo Protocolo de la Convención de la Haya, que Israel no firmó, prohíbe esas excavaciones, excepto las necesarias para proteger un sitio histórico.
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