«En Leópolis, mantuve una reunión con el secretario general de Naciones Unidas. Acordamos continuar la coordinación para implementar la iniciativa de granos», escribió el mandatario ucraniano en su canal de Telegram.
Con relación a los acontecimientos en la planta atómica de la ciudad de Energodar, Zelensky precisó que «la ONU debe garantizar la seguridad de esta instalación estratégica» y exigió asegurar su «desmilitarización y una plena liberación de las tropas rusas».
Asimismo, entregó a Guterres los parámetros de Kiev para la posible visita de la misión del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) a la planta, en la cual exigió debe realizarse «de forma legal a través del territorio liberado de ocupantes».
Por su parte, el máximo representante del organismo internacional declaró que trabajan en el envío de una misión de la ONU al asentamiento de Elénovka, ubicado al suroeste de Donetsk, para investigar el bombardeo del centro penitenciario perpetrado a finales de julio, donde murieron 50 ucranianos.
La situación en la central nuclear de Zaporozhie se agravó desde el pasado 5 de agosto, cuando las autoridades de la ciudad de Energodar denunciaron varios ataques contra la planta, por parte de las fuerzas ucranianas.
Al día siguiente, el director del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi, declaró que la institución se encontraba «extremadamente preocupada» por las acciones bélicas cerca de la central.
Relacionado con eso, advirtió que el riesgo de una catástrofe nuclear es «muy real». No obstante, el 12 de agosto y este lunes las fuerzas ucranianas atacaron nuevamente las instalaciones.
En medio de este contexto, Rusia convocó una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU para abordar la situación, durante la cual Grossi propuso que una misión de expertos inspeccione las instalaciones.
Asimismo, instó tanto a las autoridades rusas como ucranianas a cooperar para que el personal convocado tenga acceso a la central.
Por su parte, el pasado domingo, la Unión Europea instó a Rusia a retirar inmediatamente sus fuerzas militares de la central y de toda Ucrania, al tiempo que acusó a Moscú de impedir que «se cumpla la seguridad nuclear y radiológica» en la planta.
Desde la cancillería rusa desmintieron las acusaciones de Bruselas y reiteraron que los ataques contra la planta atómica los llevan a cabo formaciones ucranianas «bajo las órdenes de Kiev».
ro/odf