En un comunicado, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) precisó que el jurado reconoció la valiente decisión de acoger a un millón 200 mil refugiados procedentes de Afganistán, Eritrea, Iraq y Siria.
Estos países están golpeados por conflictos y crisis humanitarias, en la mayoría de los casos como resultado de guerras que les impusieron desde el exterior, destaca el texto.
Para el presidente del jurado, el premio Nobel de la Paz 2018, Denis Mukwege, esa postura de Merkel quedará para la historia.
“El sufrimiento es universal, las soluciones al sufrimiento deben ser también universales. La construcción de la paz consiste igualmente en abrir las puertas a los que sufren”, manifestó por su parte la directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, al conocer la noticia.
En la edición 2022 del Premio de la Paz Félix Houphouët-Boigny-Unesco, fue otorgada una mención de honor a Julienne Lusenge por su compromiso con las mujeres víctimas de la violencia sexual en Kivu Norte, en la República Democrática del Congo.
Además de Mukwege, integraron el jurado Michel Camdessus (Francia), Santiago Gamboa Samper (Colombia), Thomas Pesquet (Francia), Hayat Sindi (Arabia Saudita) y el actor estadounidense Forest Whitaker.
Creado en 1989, el premio honra cada año a las personas, instituciones u organismos privados o públicos con una contribución significativa a la promoción, la investigación, la salvaguardia o el mantenimiento de la paz, de conformidad con la Carta de las Naciones Unidas y la Constitución de la Unesco.
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