Además del presupuesto estatal o la implementación de políticas preferenciales, el país se enfocará en promover las fuentes de préstamos comerciales y de inversión para el sector privado, anticipó la gobernadora del Banco Estatal de Vietnam (BEV), Nguyen Thi Hong.
De acuerdo con la directiva, esa institución financiera se proyectará también hacia el flujo de capital crediticio y proyectos amigables con el medio ambiente, particularmente en las industrias de servicios y consumo verde, energía limpia y renovable, así como de producción y consumo bajas en carbono.
Al 30 de junio pasado, según la agencia de noticias VNA, el saldo crediticio de Vietnam para proyectos ecológicos superó los 20,3 millones de dólares, un incremento interanual de 7,08 por ciento.
Por su parte, el subdirector del Departamento de Electricidad y Energía Renovable del Ministerio de Industria y Comercio, Nguyen Tuan Anh, recordó que, según lo planificado, el país debe reducir un 25,7 por ciento la proporción de la energía de carbón para 2030 y un 9,7 por ciento en 2045.
Vietnam clasifica entre los 38 mercados con un progreso significativo en los esfuerzos para promover la banca y las finanzas hacia el desarrollo sostenible y posee una clasificación alta respecto a otras naciones en cuanto a políticas relacionadas con las contribuciones determinadas a nivel nacional.
En una conferencia realizada a mediados de este mes, la presidenta del Grupo de Trabajo sobre Banca, Michele Wee, enfatizó que para alcanzar los objetivos del crecimiento verde las finanzas se consideran un factor clave y decisivo, y resulta necesaria la participación del sector privado.
Según afirmó entonces la viceministra de Planificación e Inversión Nguyen Thi Bich Ngoc, la necesidad de capital de Vietnam para alcanzar las metas mencionadas desde la fecha hasta 2030 es de 360 mil millones de dólares, en los cuales el capital privado representa el 50 por ciento.
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