Conocido antes como Corporación Andina de Fomento (CAF), la entidad utilizará un monto de 225 millones de dólares en proyectos locales.
De estos, 150 apoyarán la esfera educativa y según su representante en el Salvador, Óscar Avalle, otros 75 millones se usarán en proyectos para enfrentar los efectos del cambio climático. Además hay proyectos de apoyo a la lucha contra la pandemia de la Covid-19, dijo.
El funcionario destacó también la rapidez, efectividad y eficiencia del Gobierno salvadoreño para cumplir los requisitos para incorporarse al banco, una decisión histórica, pues desde hacía 60 años el país no se adhería a un nuevo organismo multilateral financiero.
El CAF es una iniciativa radicada en América del Sur con socios en Europa, organizada por gobiernos independientes que buscaban autonomía y mayor libertad con respecto a otras opciones de financiamiento internacional.
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