En entrevista con Orbe, el secretario de organización de la Asociación de Profesores (Asoprof), Abdiel Becerra, denunció que ninguno de losGobiernos cumple la ley aprobada en 1995 que obliga a destinar al sector el 6,0 por ciento del producto interno bruto (PIB).
De esa manera, dijo, se contribuiría a mejorar las condiciones de los planteles, la atención a los maestros y el equipamiento de laboratorios, y dejar atrás talleres sin maquinaria, infraestructura deteriorada o la falta de tecnología en las escuelas rancho de las comunicades indígenas.
Tras manifestaciones callejeras y cierres viales que colapsaron al país en julio pasado, cuyos primeros protagonistas fueron los maestros en protesta contra el alto costo de la vida, indicó, el tema es eje de una mesa única de diálogo de alianzas populares con el Ejecutivo, en la provincia de Coclé.
En esas conversaciones, agregó, acordamos la designación del 5,5 por ciento del PIB para el sector en 2023 y llegar al 6,0 en 2024, pero los ya anunciados recortes en inversiones apuntan a la poca seriedad y la falta de voluntad política para respaldar la calidad de la educación pública.
Otro de los dirigentes de Asoprof, Diógenes Sánchez, explicó que el sistema educativo cubre unas 13 instituciones del Estado y, sin embargo, hay consternación entre sus trabajadores al ver recortes presupuestarios de hasta 500 millones de dólares.
Sánchez consideró que, si el Ministerio de Educación no cumple con lo pactado para poner fin a las huelgas, no queda otra alternativa que volver a las calles y demandar justicia social.
Durante una mesa intersectorial para evaluar el tema,se constató que, aun cuando se requieren mejores escuelas y recursos, el ramo recibirá apenas 208,6 millones de dólaresen inversión para el próximo año,362,2 millones menos de lo solicitado.
El dirigente gremial Eddy Pinto calificó como una “irresponsabilidad” que no se asignen los fondos necesarios, y la directora de la Fundación para la Promoción de la Excelencia Educativa, Aida Alfaro, subrayó que, si bien hay presión sobre el gasto público, la realidad exige mayor inversión para impulsar la transformación docente necesaria.
(Tomado de Orbe)
















