En su primer discurso ante la Asamblea General de Naciones Unidas desde que reemplazó al dimitente Boris Johnson al frente del gobierno británico dos semanas atrás, Truss tildó de “belicoso” al presidente ruso, Vladimir Putin, quien este miércoles advirtió que Moscú utilizaría todos los medios a su alcance para defenderse.
La flamante mandataria también elogió la respuesta de los países occidentales a la operación militar rusa en Ucrania, pero advirtió que la ayuda a Kiev no debe disminuir.
Demostramos que el poder de actuar y la voluntad de enfrentar la creciente agresión, pero esto no debe ser algo puntual, aseveró Truss, quien la víspera prometió entregar el año próximo al gobierno ucraniano otros dos mil 300 millones de libras esterlinas (más dos mil 600 millones de dólares) en armamento.
También confirmó que para 2030, el Reino Unido dedicará el tres por ciento de su Producto Interno Bruto a gastos de defensa.
Esta debe ser una nueva época para comprometernos a hacer todo lo que sea necesario para cumplirle a nuestro pueblo, y defender nuestros valores, aseveró Truss, quien durante el tiempo en que se desempeñó como canciller se ganó el calificativo de nuevo halcón de la política exterior británica.
En el discurso que cerró la segunda sesión plenaria de la Asamblea General de la ONU, primera que se realiza de forma presencial tras la pandemia de la Covid-19, la primera ministra británica también rindió tributo a la recién fallecida reina Isabel II, a quien calificó como la roca sobre la que se construyó el Reino Unido moderno.
Resaltó además los planes de su Gobierno para enfrentar la crisis energética provocada por el incremento de los precios globales de los hidrocarburos, y poner fin a las importaciones de combustibles fósiles.
En el 77 periodo de sesiones de la Asamblea General participan 150 jefes de Estado o Gobierno y cancilleres de todo el mundo.
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