Al participar en la 66 Conferencia General del Organismo Internacional de Energía Atómica en esta ciudad, el canciller advirtió sobre los riesgos de un escenario marcado por la inseguridad y señaló que podemos estar al borde de una tragedia mayor si la tecnología de ese tipo es usada con fines bélicos.
Luego de décadas de acuerdos sobre la reducción de arsenales y la aceptación generalizada de los principios contra la no proliferación, no debe permitirse ni siquiera la posibilidad de especular con el empleo de armas nucleares.
Argentina llama a evitar cualquier acción que exponga a la población a un futuro difícil de dimensionar, indicó.
Asimismo, apoyó el uso pacífico de esa energía, establecido en el artículo cuarto del Tratado de No Proliferación Nuclear.
Insto a la prudencia y dejo expresada mi preocupación por los riesgos que enfrenta el planeta tanto en nombre de mi país como en representación de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños. No es una simple referencia geográfica: se trata de la zona de paz más densamente poblada del mundo, afirmó.
“Desde nuestra región sabemos que la integración es una herramienta de paz; que la dignidad de los pueblos se juega en el desarrollo con justicia social y no en el campo de batalla; que los combates diarios contra la desigualdad, la exclusión y el descarte sólo podemos darlos en comunidad con nuestros vecinos”, añadió.
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