Los fondos provienen del presupuesto central y servirán para costear las reparaciones de la infraestructura y las instalaciones públicas destruidas en el condado de Luding durante el temblor, ocurrido el pasado día 5.
Anteriormente este mes el gobierno chino destinó 28,9 millones de dólares para la atención a damnificados y respaldar las labores de búsqueda y rescate, las cuales se realizaron bajo el temor de que aguaceros torrenciales desencadenaran grandes desastres geológicos como deslizamientos de tierra, desborde de ríos e inundaciones.
El temblor fue de 6,8 grados de magnitud, tuvo un epicentro de 16 kilómetros de profundidad y le siguieron más de dos mil réplicas.
Sichuan sufre con periodicidad el impacto de severos terremotos y uno de ellos en 2008 dejó allí 87 mil muertos y miles desaparecidos, por lo cual fue definido como el peor registrado en China en los últimos años.
En junio pasado hubo algunos igualmente con alto salto mortal y material, e incluso uno fue una réplica del sismo de siete grados ocurrido en 2013, cuando fallecieron 196 individuos y otros 11 mil resultaron heridos.
ymr