Dedicada a temas de las ciencias de la Tierra y el espacio, el medio científico destacó que ese choque del asteroide aconteció en aguas poco profundas y significó la desaparición repentina de tres cuartas partes de las especies de plantas y animales de la Tierra.
La indagación realizada por un equipo de investigadores de la Universidad de Michigan, en EStados Unidos, presentó la primera simulación global del tsunami por el impacto de Chicxulub desde el contacto inicial del asteroide, de aproximadamente 14 (km) de diámetro, hasta la propagación global.
Para ello, según explica, los expertos utilizaron un hidrocódigo para modelar el desplazamiento del agua, los sedimentos y la corteza durante los primeros 10 minutos, y además usaron un modelo oceánico de aguas poco profundas a partir de ese punto.
Acorde con el texto de AGU Advances, el tsunami del impacto fue hasta 30 mil veces más enérgico que el del Océano Índico ocurrido el 26 de diciembre de 2004, el cual cobró la vida de más de 230 mil personas, considerado uno de los más grandes de la historia moderna.
La zona del impacto fue el territorio que hoy ocupa la península de Yucatán, México, donde hay un cráter de más de 180 kilómetros (km) de diámetro, pero en sus indagaciones los científicos acopiaron información geológica, la mayoría obtenida a través de perforaciones oceánicas, en 120 lugares formados poco antes y poco después de la caída del asteroide.
Acorde con el texto, las velocidades de flujo superaron los 20 centímetros por segundo a lo largo de las costas de todo el mundo, así como en las regiones de mar abierto en el Atlántico Norte, el Atlántico Sur ecuatorial, el Pacífico Sur y la Vía Marítima Centroamericana; lo cual hace suponer “barrieron el lecho marino y alteraron los sedimentos a más de 10 000 km de la costa”.
lam/smp