Santos expuso la idea de que el Gobierno busque esos contactos durante declaraciones en el espacio de entrevista Encuentro TVX, una iniciativa que tiene partidarios y detractores en el país.
La funcionaria insistió en que el Ejecutivo debe conversar con esos grupos. En 2012, ese argumento derivó en una tregua entre la administración presidencial de Mauricio Funes y las dos principales pandillas.
El tema del diálogo puede sonar escandaloso, pero hay ejemplos que con acompañamiento de organismos internacionales se puede seguir avanzando.
Al respecto, algunos informes señalan que a seis meses de que el régimen de excepción dio las herramientas legales más contundentes a la Policía Nacional Civil, la Fuerza Armada, la Fiscalía General de la República y el Órgano Judicial en su guerra contra las pandillas, algunos de estos criminales piden un mejor trato de las autoridades.
«No», respondió el presidente Nayib Bukele a un video de un pandillero con tatuajes hasta en el rostro. «Entréguense a la justicia y paguen la pena por los crímenes que cometieron. Esa es la única alternativa que tendrán. De lo contrario, enfréntense a las consecuencias», escribió el mandatario en Twitter.
Por el contrario, Santos estima que el Gobierno debe sentarse a dialogar con los pandilleros. Esta práctica fue usual en las administraciones de la Alianza Republicana Nacionalista (Arena) y Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), cuando se asesinaban de 10 a 12 salvadoreños diariamente, según dijo en un Twitter.
Cualquier intento de diálogo que se alcance entre el Ejecutivo y las pandillas debe ir con transparencia ante la población salvadoreña, apuntó la activista.
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