Pese al duro debate en que las fuerzas de derecha se alinearon frente a la propuesta, el presidente de la Cámara Alta, Ander Gil, sentenció el dictamen, con el resultado de 128 votos a favor, 113 en contra y 18 abstenciones.
“Queda definitivamente aprobado por las cortes generales el proyecto de ley de memoria democrática”, destacó Gil.
La legislación contempla resarcir a las víctimas de la dictadura de Francisco Franco (1939-1975), la exhumación de fosas comunes, la anulación de condenas y el fin del silenciamiento de los perdedores de la Guerra Civil (1936-1939).
Se refuerza asimismo el compromiso del Estado en la búsqueda de desaparecidos de la Guerra Civil y el franquismo, y abre la puerta a estudiar trasgresiones de derechos humanos presumiblemente cometidas entre 1978 y finales de 1983.
El texto fue impulsado por los socios del Gobierno, el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y el bloque Unidas Podemos, con el rechazo del Partido Popular, Ciudadanos, UPN de Navarra y los ultras de Vox, todos alineados con la derecha.
La Ley de Memoria Democrática no incorporó ninguna enmienda desde aprobación en el Congreso de los Diputados el pasado 14 de julio, por lo cual es definitiva.
mgt/ft