La empresa apuntó que este es un escenario repetido por cuatro años consecutivos, luego de que las restricciones de la cadena de suministros dieran paso a una caída en la demanda.
LMC Automotive previó para el próximo año un alcance en las entregas de este tipo de vehículos de alrededor de 85 millones, condicionadas por la cautela de los consumidores ante el aumento de la inflación y tasas de interés bancarias.
La firma acentuó que esta situación es comparable con las cerca de 90 millones de entregas realizadas en 2019, un año antes de que la pandemia de la Covid-19 provocara el cierre de concesionarias y mantuviera a las personas en casa en aislamiento social.
Las ventas de automóviles mantienen índices por debajo de los niveles de 2019 después de que la creciente demanda de productos de consumo liquidara los inventarios mundiales de semiconductores y obligara a los fabricantes a detener las plantas, advirtieron analistas del sector.
Asimismo, los expertos detallaron que los pocos autos disponibles a la venta, junto a las iniciativas de fabricantes como BMW, Ford y Stellantis de concentrar la producción en sus modelos más redituables, contribuyeron al alzo del costo de los automóviles en el mercado.
En ese sentido, el director de proyecciones de ventas globales de LMC Automotive, Jonathan Poskitt, acentuó que la demanda de este bien se debilita al tiempo que ocurre un deterioro de las perspectivas económicas mundiales.
Poskitt dijo que ante esta realidad los clientes moderan su apetito por realizar compras importantes, como es el caso de un automóvil nuevo.
ro/yag