Según las autoridades del sector hidráulico, ahora el embalse pasó de tener de 6,6 a 8,1 por ciento de su capacidad gracias a las lluvias de los últimos días en la zona y en la cuenca del río Yangtsé, su principal afluente.
Como la situación es más favorable, la provincia de Jiangxi degradó el máximo nivel de emergencia por sequía, adoptado desde septiembre anterior debido a la reducción del lago.
Las recientes precipitaciones también beneficiaron y aliviaron la fuerte sequía en el norte y centro de las demarcaciones de Hubei y Anhui, mientras hay pronósticos de fuertes aguaceros en los próximos tres días en Sichuan y Yunnan.
Sin embargo, todavía hay crisis por falta de lluvias en las regiones ribereñas del curso bajo del Yangtsé.
A finales de septiembre China emitió la alerta roja porque el volumen del lago Poyang retrocedió al nivel más bajo desde 1951 y supuso dificultades para el abastecimiento del líquido, principalmente en Jiangxi.
La reducción fue tanta que quedó al descubierto un puente de granito de dos mil 657 metros de largo construido durante la dinastía Ming (1368-1644.
El lago es conocido por los lugareños como “el riñón” debido a su importancia en la regulación del río Yangtzé, el más largo de China, pero entró en su período seco el pasado 6 de agosto y fue la fecha más temprana desde 1951.
Aparte de afectar el suministro del líquido a la población, la transportación de barcos y el riego a las cosechas en la zona, la situación constituye una amenaza para las aves migratorias que escogen al Poyang como una importante parada mientras se dirigen al sur durante el invierno.
China presenta una crisis similar en otros lagos de agua dulce como el Shijiu y el Dongting, su segundo más importante.
El país vivió el verano más intenso desde 1961 con varios días seguidos con alerta roja por calor en el suroccidente y centro, decenas de ríos secos y una reducción alarmante en el agua en sus embalses al punto de verse estatuas sumergidas durante 600 años.
En agosto el Gobierno destinó financiamiento para mitigar los daños ocasionados por la sequía en el rendimiento de las cosechas agrícolas, la crianza de ganado y la estabilidad del sistema electro-energético.
También incrementó la siembra de nubes y logró la caída de lluvias en lugares como Sichuan, Chongqing, Jiangxi, Hunan y Anhui.
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